Después de ponernos al día con los amores, y de habernos dado todos los consejos habidos y por haber; fuimos a dormir. Era viernes, sábado en realidad, y todas estábamos cansadas de la rutina semanal. Tiramos unos colchones en el piso de la habitación de Cande y caímos rendidas.
A la mañana siguiente, o mediodía mejor dicho, nos levantamos y cada quien se fue a su casa, todas teníamos algo para hacer. Euge, había prometido ayudar a su abuela con unas cosas en la casa, Rochi tenía que ir con su hermana no recuerdo donde, Cande debía hacer un trabajo para la facultad, a lo que insistí en ayudarla pero no quiso. ‘Es sábado Lalita, disfrutá del día; salí. O mejor, pasalo con Peter’, me dijo. Por mi parte no tenía mucho por hacer, más que ordenar mi cuarto.
Llegué y mi mamá estaba esperándome con la mesa servida. Mi hermano no estaba despierto, hasta las cuatro no sueñes que se levante. Almorzamos; siempre hay algo de qué hablar, que el trabajo, que la facultad, que las chicas, que los amores. Terminamos de comer, obviamente ayudé a juntar las cosas, y fui a mi cuarto. Acomodé la ropa, tendí la cama (léase: el viernes no la había tendido) y puse la radio en mi equipo de música. Días de inverno si los hay, me asomé a la ventana con los vidrios empañados, y traté de absorber el poco sol que había.
Con la vista clavada en las nubes, y con la música en mi habitación, como por arte de magia sentí la necesidad de plasmar en un papel todo lo que me sucedía. Cada vez te siento más cerca de vos me enamoro y lo guardo en mi piel. Siento como un escalofrío, yo quiero acercarme pero vos no me ves. Las palabras brotaban desde lo más profundo de mi corazón ¿Qué me pasa? ¿Qué siento? Voy perdida y ya no se qué hacer, sé que tengo que actuar pero me vence la timidez. Tu amor no me cabe en el cuerpo, tengo que animarme esta vez. ¿Y si es verdad que esto va enserio? ¿Y si es verdad que estoy empezando a sentir cosas nuevas? Escaparé contigo para siempre, te cuidaré y te enseñaré a quererme. Y tu corazoncito junto al mío, unidos en la misma dirección. Definitivamente algo distinto hay en mí. Algo especial, lleno de pureza y de verdad; que va más allá de un beso, más allá de las miradas. Escaparé contigo por el mundo, al fin inseparablemente juntos. Seremos como el mar y las estrellas, unidos en un solo corazón. Escapar ser libre. Sin nada ni nadie que te ate. Dejar fluir, dejarla ser. Sé que somos muy diferentes, en tu mundo no existo y me quiero morir. Pero entre tus ojos yo vivo, y si me besaras yo sería feliz. Escapar, cambiar de aire, de rutina. Volar, y dejar ir. Voy vencida te puedo perder, y lo quiero intentar aunque deba llorarte después; el mundo sabrá que te quiero, tengo que gritarlo otra vez. Caerse, y levantarse. Gritar lo que sentís, a los cuatro vientos, sin que nada te importe. Vivir cada minuto como si fuera el último, llorar de alegría, reírte de tus desdichas. Jugársela, así sea lo último que hagas. Brillar, soñar y escapar a un mundo mejor.
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