Capítulo 08: Lo que deba ser, será

Llega un momento en que necesitamos cariño, afecto, querer y que nos quieran. Pero muchas veces el amor está más cerca de lo que pensamos, y no lo podemos ver. Vivimos esperando ese amor, pretendemos que venga hacia nosotros como por arte de magia, pero no es así. El amor siempre está, pero a veces no se deja ver, y tenés que salir a buscarlo.

Yo me transformo en agua
sólo por subir al cielo y volver
a caer en tus ojos
lo haría una y otra vez

Cuenta Peter

Hacía dos días que me había cruzado con Lali, chocado mejor dicho. Desde que me dijo que no tenía novio, todo el tiempo se me cruza por la cabeza invitarla a salir, a tomar algo; siento que tengo que conocerla, como amigos ¿eh? “¡Peter esa no te la creés ni vos!”, bueno sí, si da para algo más obvio. Con ella me pasa algo especial, y mira que estuve con muchas minas ¿eh?, pero ella es distinta. Sabe lo que quiere, es segura, linda, y se parte. “Ubicate un poco, Pedro” Bueno sí, es hermosa. La cuestión es que no quiero que piense cualquiera, pero tampoco que crea que soy medio lenteja; ¡ay dios! parezco una mina haciendo estos comentarios. Ma’ si y le mando un mensaje y que sea lo que tenga que ser.

Mensaje de Peter: Hola Lali soy Peter, quería saber si te gustaría salir a tomar algo conmigo, mañana a la tarde

Cuenta Lali

Hacía un rato que había terminado de almorzar, estaba en el comedor esperando que el agua se caliente para hacerme un té, estaba congelada. Leía una revista, y sonó mi celular, tenía un mensaje nuevo. La pantallita de la tapa decía un número que no conocía, lo abría y era de Peter. Sí de Peter. Me preguntaba si quería salir a tomar algo con él, mañana a la tarde. “Por fin, el perno este si avivó” pensé. Y aunque no lo crean, al día siguiente tenía que cursar a la tarde. Pero yo no me iba a quedar sin salir con él, asique…

Mensaje de Lali: Perdonáme pero mañana a la tarde curso y no puedo faltar. Salgo a las ocho, si querés nos encontramos a esa hora en el centro.

Aprobeché los minutos de espera para poner un saquito en la taza, con tres cucharaditas de azúcar. Unos minutos después y mi teléfono sonó.

Mensaje de Peter: Bueno dale, te paso a buscar por la facu J

‘Naa mas tierno’ pensé en voz alta. Si estaba hecha un cubito por el frio, ya está me derretí.

Mensaje de Lali: Dale, nos vemos mañana. La facultad queda en XXX. Besos

No terminé de de escribir el mensaje, que cazé el tubo y llamé a Cande, obvio. Le conté, y me dejó sorda del grito que pegó “AHHHH! Morci, ¿viste que te dije? Tengo que ser la madrina yo ¿Eh?” Y la flaca siempre con esas salidas. Cuestión que ni tomé el té, quedó ahí el pobre; estaba contenta.

Por este sol , quemaría mis días
por este sol , te entrego toda mi vida.
Bastará, sólo con verte
bastará, ver tu cielo de frente
bastará, sólo con verte

Bastará. Ver tu cielo de frente

Cuenta Peter

Cuando Lali me dijo que no podía se me vino el mundo abajo (buee exagerado le decían) pero si, no era lo que esperaba. Es como si fueras a patear un penal, y le pegás al travesaño. Pero por suerte hubo córner, cabeceé y metí un gol. Cuestión que al día siguiente, me encontraría con ella. Me siento como un nene con chiche nuevo, tengo muchas expectativas con; yo no la llamaría cita, pero sí un encuentro. Igual no me apuro, lo que deba ser, será.

A veces el amor se esconde, y cuesta más encontrarlo; pero siempre está. Podés equivocarte, sufrir, arrepentirte. Podés amar, compartir, enamorarte. Son cosas que quedan grabas en la mente, pero mucho más en el corazón. Por más que pasen los años; una canción, un olorcito, una palabra, un nombre; te va a traer de recuerdo esos momentos. Porque el amor es único, y no se puede borrar del alma.